La Policía Nacional ha detenido a dos jóvenes de 23 años, con antecedentes policiales anteriores, por una nueva estafa relacionada con la adquisición fraudulenta de teléfonos móviles para su posterior venta.
De nuevo, estos dos detenidos forman parte de un clan familiar dedicado a la comisión de hechos de esta tipología, en el que sus integrantes acumulan numerosas detenciones. Los máximos dirigentes, sin embargo, residente en Nigeria.
El 'modus operandi', nuevamente, consiste en la adquisición de estos teléfonos por Internet por un precio que nunca se abono y su posterior venta en establecimientos de compraventa de efectos de segunda mano. Incluso, en ocasiones, solicitan el ingreso posterior de nuevas cantidades por un presunto error.
En este caso, las denuncias fueron interpuestas en la Comisaría de San Fernando y el puesto de la Guardia Civil de Chiclana de la Frontera.
A uno de los jóvenes, además, le consta una búsqueda por el Juzgado de Instrucción número 25 de Barcelona por otro delito de estafa.
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