La Audiencia Provincial acogió hoy la vista oral contra J.M.H.B, M. J.M.S., F.P.G.H y G.B.B., imputados todos en una operación contra el tráfico de drogas y el blanqueo de capitales. Tras la declaración de varios agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil -la operación se llevó a cabo de forma conjunta- el Ministerio Fiscal rebajó en sus conclusiones la petición de pena a los dos principales acusados. De esta forma, J.M.H.B. y M.J.M.S., que se enfrentaban a 10 años de cárcel cada uno (6 por un delito contra la salud pública y 4 por blanqueo de capitales), vieron rebajada la petición a 4,5 años por el primero de los delitos y a 3,3 por el segundo, así como a las correspondientes multas.
Respecto a F.P.G.H., el fiscal mantuvo la petición de tres años de prisión por un delito contra la salud pública, así como un año de cárcel por blanqueo de capitales para G.B.B., que además destacó carece de antecedentes penales.
Por su parte, el abogado de la defensa mantuvo la libre absolución de los cuatro acusados.
Operación policial conjunta
Los hechos que hoy se juzgaban tuvieron lugar en 2012, cuando en el mes de mayo en una operación policial conjunta de la Policía Nacional y la Guardia Civil se procedió a registros domiciliarios, de garajes y trasteros, resultado de los cuales los agentes se incautaron de sustacias estupefacientes -concretamente cocaína y hachís-, un molde para el prensado de cocaína y bolsas con recortes típicos para dosificar la droga.
En la vista oral, los agentes que participaron en los registros afirmaron que los perros marcaron varios lugares tanto en la vivienda de la calle Teso de la Feria, como en el trastero de un garaje. Por su parte, los que participaron en el seguimiento y vigilancia de los acusados destacaron que el intercambio de "bolsas" se producía tanto en la calle como en los domicilios. Uno de ellos detalló que tras autorizar el juez las escuchas telefónicas, comprobaron cómo quedaban con los presuntos clientes para "dejar a los niños o recoger un ordenador" en un lugar concreto, y una vez allí mantenían una breve conversación con la correspondiente entrega, en la que no había ni niños ni ordenadores. "Ella era la que hacía las entregas", afirmó uno de los agentes respecto a M.J.M.S.
Por otra parte, en la vista también declararon dos peritos que tasaron los tres vehículos propiedad de la pareja, con una sustancial diferencia ya que el primero los taso en 28.470 euros, mientras que el segundo en 15.300 euros.
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