Con casi 30 años a sus espaldas, la Ganadería Valdefresno encara un nuevo año con la ilusión y la esperanza de que el coronavirus dé un respiro a la industria de la tauromaquia. 2020 fue un año nefasto para el mundo del toro, la expansión del coronavirus canceló multitud de eventos, tanto en plaza, como en festividades populares, dejando a los productores de reses bravas entre la espada y la pared.
Si bien es cierto que el año no ha comenzado muy halagüeño, la tercera ola golpea a España con cifras récord de contagios, se espera que la llegada de la vacuna permita celebrar festejos que vuelvan a engrasar la industria del toro.
La Ganadería Valdefresno, ubicada en Tabera de Abajo (Salamanca), fue creada en 1992 por Nicolás Fraile Martín tras la extinción la copropiedad ganadera “Puerto de San Lorenzo”. Con animales procedentes de la ganadería Mercedes Flores Sánchez, la actual empresa salmantina cuenta con la sangre y la genética de algunas de las mejores estirpes del toro de lidia español.
En 2008 se adquieren 40 vacas y un semental de la ganadería de D. Javier Pérez-Tabernero, de origen Atanasio Fernández, escogiéndolas de las 170 vacas que formaban la ganadería antes de ser eliminada. En la actualidad la ganadería está formada siguiendo la línea de D. Lisardo Sánchez y D. Atanasio Fernández en pureza.
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