La higiene de los baños públicos siempre ha sido algo discutidoy difícil de encontrar. No es de extrañar que, cuando alguien visita untoilette que es usado por más gente (como pueden ser los de un bar, un centrocomercial o las estaciones, por poner unos ejemplos), sus ganas desaparezcan derepente debido a la suciedad que suele caracterizar estos espacios.
Pocos baños públicos se libran de este cliché. A veces ni enlugares que se presuponen limpios, como pueden ser los de una facultad o unespacio universitario. Esto es lo que estaba ocurriendo en el Edificio I+D+i dela Universidad de Salamanca, donde pese a los esfuerzos del personal delimpieza que cada poco acudían, los váteres estaba asiduamente sucios y conrestos.
Por ello, alguien decidió actuar a su manera. Consideró quetodo el mundo que visita los baños de dicho espacio es porque hace uso delmismo (es decir, está trabajando o realizando alguno de los cursos de formaciónque se imparten en el Edificio I+D+i) y, por ende, valoró que tiene que tenercierto nivel de formación para saber que los baños no han de ensuciarse demanera gratuita.
Así, decidió colocar un cartel en alguno de los váteresrecordando que ese baño es usado por más gente. El mismo decía lo siguiente:
“Si estás usando estebaño, esto demuestra que has llegado a este edificio por tus méritosintelectuales y conocimientos.
Te rogamos que asímismo demuestres tus valores, decencia y cultura cívica al usarlo, pordeferencia a tus compañeros y al personal de limpieza.
Por favor, mantelolimpio y cuidado. Tus compañeros”
Habrá que ver si tiene efecto pero, de momento, sí hacausado sorpresa entre los usuarios habituales del I+D+i.