Pese a los reconocimientos legales, en España siguen existiendo casos de discriminación hacia las personas LGBTI (lesbianas, gays, bisexuales, trans e intersexuales) y en un tercio de los países del mundo se criminaliza la homosexualidad con penas de prisión o incluso de muerte. La educación es el pilar fundamental en el respeto a la diversidad y, bajo ese concepto, las universidades de Salamanca y Granada han impulsado un grupo de trabajo sobre la temática que pretende avanzar en aspectos como formación, atención, normativas y docencia.
Propuestas del grupo de trabajo LGTBI Universidades
Desde la USAL y la UGR se propone trabajar de manera coordinada en la lucha contra el odio y la intolerancia. Las dos universidades han impulsado un grupo junto a las de Alcalá, Alicante, Autónoma de Barcelona, Autónoma de Madrid, Barcelona, Cádiz, Cantabria, Carlos III de Madrid, Complutense de Madrid, Córdoba, Extremadura, Girona, Huelva, Jaén, La Coruña, La Laguna, La Rioja, León, Lleida, Málaga, Oviedo, Oberta de Cataluña, Pablo de Olavide, País Vasco / EHU, Pompeu Fabra, Rey Juan Carlos, Rovira i Virgili, Sevilla, Valencia, UNED, Valladolid y Zaragoza que busca dotar de mayor visibilidad a su trabajo en la temática, mediante el establecimiento de alianzas entre instituciones educativas, aunando sinergias y compartiendo experiencias, de manera que pueda motivar otras a universidades que aún no han establecido competencias sobre las realidades LGTBI.
Las líneas de trabajo iniciales que se plantea el grupo son las relativas al estudio de la estructura de las competencias LGTBI en cada Universidad, las referidas a campañas institucionales a través de las cuales se incida en la concienciación y sensibilización de las comunidades universitarias y del conjunto de la sociedad así como la formación, haciendo hincapié en la necesidad de incluir la diversidad afectivo sexual y de género en los planes de formación dirigidos a Estudiantado, PAS y PDI.
Asimismo, otras de las líneas prioritarias sería la atención a personas LGTBI, de manera que se les garantice que puedan expresarse libremente y con garantías de igualdad en cuanto a su identidad de género u orientación sexual. Ello supone establecer mecanismos para prevenir y detectar situaciones de acoso a personas LGBTI y ayudar a aquellas personas que ya hayan sufrido alguna.
El grupo también pretende trabajar en los protocolos y la normativa necesaria en cada institución para continuar con el apoyo a la petición de una ley estatal que garantice los derechos de las personas LGTBI. Trabajar la docencia y la investigación, para que, de una manera transversal, y de forma gradual, se incluya la perspectiva LGTBI en planes de estudios y guías docentes y se fomenten investigaciones en temas de diversidad es otro de los factores clave.