El Consejo de Ministros aborda este viernes los primeros detalles de una reforma laboral que seguirá los preceptos del programa electoral del Partido Popular al no alcanzar un acuerdo la patronal y los sindicatos. El objetivo principal es simplificar la tipología de contratos laborales para reducir la temporalidad y dar expectativas de estabilidad, flexibilidad y seguridad a todos los trabajadores y empresas.
Según han desvelado varios ministros durante los últimos días, el Ejecutivo aboga por un único contrato a tiempo completo con cláusulas comunes para todos los nuevos trabajadores y otro contrato para animar el empleo a tiempo parcial, a fin de simplificar los cerca de 40 contratos con los que cuenta el mercado laboral español.
También se quiere cambiar el sistema salarial para basarlo en ganancias de productividad y no resultar inflacionista. Otra de las principales novedades sería reducir de tres meses a quince días el plazo en que un trabajador debe estar inscrito en el paro para poder acogerse al contrato de fomento del empleo estable.