El cierre de la hostelería y la suspensión de la venta en mercadillos locales y comarcales ha hundido el mercado de patata -variedad agria- "de gran producción en Salamanca" que ahora se ve sin salida comercial.
UPA explica en un comunicado que el destinoprincipal de esta variedad de patata era la hostelería, restauración y bares -también para Portugal- con lo que el cierre detodos estos puntos de venta, ha supuesto la paralización de las ventas.
Esta es una patata, indica la organización agraria, "al no estar lavada, es despreciada por el gran comercio, a pesarde su calidad y de la mayor duración en casa. Sin embargo, la distribución prefiere traer patata de origen francés, despreciando una vez más la producción nacional".
Según la OPA, productores y cooperativas salmantinas denuncian que, de un precio de venta de 20 céntimos/kgantes del cierre por la pandemia, ahora no alcanza los 8 céntimos/kg, con un importante volumen almacenado en la provincia. Con esta situación, UPA pide al sector de la distribución "sensibilidad, ayudando alconsumo de productos de origen nacional, frente al extranjero".