Era uno de los grandes temores de la artista y de la organización. Y así pasó. Las tormentas que se han producido -y están produciendo- en Salamanca han obligado a suspender el último concierto del II Festival Internacional de Jazz. Así, tras cinco fantásticos días en los que la ciudad deSalamanca ha podido disfrutar de grandes y variadas composiciones con motivodel II Festival Internacional de Jazz, Sarah McKenzie no habrá podido deleitar con su cuartetohabitual -de piano, bajo, batería y guitarra- y su trío de viento metal con unacomposición especial hecha por ella misma y que retrotrae al estilo más purodel jazz.
La artista comentó en rueda de prensa esta mañana que está deseosa por dar este concierto. Pero directamente la tormenta impidió que se realizasen hasta las pruebas de sonido, que se habían pospuesto precisamente por la lluvia.
Esta australiana afincada en Londres ha compuesto un jazzcon un trío de instrumentos de viento siguiendo así una de sus inspiraciones,el gran Duke Ellington, una de las grandes figuras del jazz entre los años 20 ymediados de los 60. Eso sí, todas sus composiciones y arreglos están adaptadosa su propia visión de hoy en día, lo que hace disfrutar de una música máspersonal.
Era un concierto único en España, que iba a tener lugar desde las22:30 horas en el Patio Chico, ‘Sarah McKenzie & Horns’ puesto que fue la elegidapor los organizadores para poner el broche al II Internacional de Jazz. FernandoViñals, coordinador del Festival, explicaba que buscaban algo “másespectacular, y así pensamos que va a ser”.
“Siempre he sidoadmiradora de Duke Ellington pero no necesaria vuelvo a un estilo tradicional”
Sarah McKenzie destacó que siempre fue admiradora de DukeEllington porque, además de ser un gran pianista, era un gran compositor deobras y estaba siempre acompañado de grandes músicos, algo que ella también haintentado realizar. “Yo no soy Duke Ellington”, matizaba entre risas,resaltando que sus arreglos no tienen que ser necesariamente un estilo más tradicional.
Eso sí, conserva la idea que el jazz es algo global, y noentiende su función sólo al piano y a la voz sino también siendo parte de lacomposición y de la dirección del resto de grupo. Precisamente, el ser suspropias composiciones le permiten tener un estilo ‘Sarah Mckenzie’ donde plasmasu visión actual y personal.
“No esperabaencontrar una ciudad tan bonita”
Para la australiana es un honor increíble ser la encargadade clausurar el II Festival Internacional de Jazz de Salamanca, porque ademásno se esperaba encontrar “una ciudad tan bonita” que ha podido conocer estamañana dando un paseo, confiando nuevamente en que la lluvia no sea unimpedimento para disfrutar de su música esta noche, algo que finalmente sí ocurrió.
Una música que ha variado en los últimos años, aproximándosemucho a la improvisación, algo de lo que ella se aleja un poco porque le gustadisfrutar del jazz junto a todo su equipo con melodías que puedan interpretarcoralmente, como se hacía antaño, algo que hacen con orgullo puesto que todos sonapasionados de la música.
Además, tampoco sabe si el jazz va a sufrir un repunte enlos próximos años, como están viviendo muchos estilos de música, pero sí quecree que le gusta cómo van las cosas, al menos en lo que respecta a ella y a suequipo.
“Con casi totalseguridad habrá un III Festival Internacional de Jazz”
Fernando Viñals valoraba positivamente este II Festival Internacionalde Jazz, señalando la magnífica respuesta que ha dado el público salmantino asícomo la suerte del tiempo que ha evitado todas las tormentas.
Así, confirmó que, por las conversaciones mantenidas estosdías, habrá “con casi total seguridad” una tercera edición del festival, ya queel balance ha sido, en general, “fantástico”.