La etapa reina de esta Vuelta a España2020 será la que une los municipios de Sequeros y de La Covatilla.Por primera vez en la historia de la ronda española el puerto bejarano será eljuez definitivo de la general, puesto que al día siguiente la carrera finalizaen Madrid.
Un puertoque de los tres primeros de la general solo conoce en carrera Richard Carapaz, ya que el ecuatoriano loascendió en 2018 en las filas del Movistar, precisamente, con el mismo paso porCandelario que tanto fascinó al mundo del ciclismo. Primož Roglič y Hugh Carthy, lo desconocen,puesto que, aunque el esloveno ganó la ronda de 2019, fue también su primeraparticipación en la Vuelta a España; en el caso del inglés, esta es la terceravez que toma la salida de la ronda española, pero ni en 2016 ni en 2019 lacarrera llegó al alto bejarano. Sí la conocen también el cuarto y el quintoclasificado de la general, Daniel Martin y Enric Mas;el primero de los dos subió La Covatilla por primera vez en La Vuelta en 2011con un estreno espectacular, puesto que, enfundado en el maillot del equipoGarmin, se llevó la etapa. En 2018 el irlandés se retiró justo el día despuésde subirla para acompañar a su mujer en el nacimiento de sus dos hijasmellizas. Por su parte, Enric Mas ascendió el puerto bejarano luchando por lageneral en la edición de 2018, en la que terminó segundo, etapa que gano Ben King y en la que Simon Yates -vencedor de esa edición-se colocó como líder.
Estaetapa será bastante diferente a la del año 2018, aunque comparten el mismotramo final desde Candelario hasta LaCovatilla. En la edición de hace dos años la salida estabasituada en Talavera de la Reina y atravesaba los puertos abulenses de El Pico oPeña Negra -en su vertiente más fácil- para llegar a Béjar y subir porCandelario hasta la meta. La peculiaridad de esta edición es que prácticamentetoda la etapa, salvo el pequeño tramo desde Riomalo de Abajo hasta Las Mestas,se desarrolla en suelo salmantino conhasta cinco puertos de paso hasta la llegada a la estación de esquí.
La salida será en torno a las 12:00horas desde el municipio de Sequeros yla primera dificultad montañosa del día estará en el Puerto del Portillo (1ªcategoría, 10,1 kilómetros y un porcentaje medio del 6,5 %), donde loscorredores que busquen meterse en la fuga del día encontrarán aquí un terrenoideal para ello.
Sucesivamentelos corredores pasarán por el alto de San Miguel de Valero (3ªcategoría, 12 kilómetros y 3,4 %) y el Alto de Cristóbal (3ªcategoría, 6,2 kilómetro y 4,7 %), para después tomar dirección Béjar y afrontar la traca final dondeel equipo del líder intentará controlar la carrera y los outsiders ponerles enproblemas.
Unavez arriba, en torno a las 16:15 con el horario más rápido, el pelotón volveráa tierras salmantinas en el momento que comienza un peligroso y estrechodescenso que pasará junto al embalse de Navamuño paraacercarse a Candelario. Máxima atencióndeberán tener los ciclistas llegados a este punto, tanto los que luchen por laetapa como los de la general -si no coinciden en ser los mismos-. Ya se vio enla etapa del 2018 que el paso por Candelario, con sus calles estrechas y supavimento pedregoso, supuso un gasto de energía importante -tanto en esfuerzocomo en tensión- para los corredores que luego pueden acabar pagándolo en lalarga subida a La Covatilla, juez incuestionable de esta edición de 2020.
Aunquepara la organización el puerto de La Covatilla (categoría Especial, 11,4kilómetros de distancia y 7,1 % de media) comienza al pasar Navacarros, lo cierto es que la durezallega una vez afrontado el pequeño descansillo posterior al cruce de La Hoya. Desde este punto, comienzan algomás de 7 kilómetros de verdadera dureza con rampas máximas de desniveldel 12 % y es que La Covatilla no avisa, un ligerodescenso y de golpe rampas del 10 % ya en ese primer kilómetro.
Un puerto que además secaracteriza por la escasez de árboles y la poca protección, por lo que lalluvia y el viento jugarán un papel crucial en el devenir de esta subida quesolo ofrece un pequeño descansillo a falta de tres kilómetros para volver a recibira los corredores con unos kilómetros finales que se suelen hacer largos por suinesperada dureza. Precisamente, para el devenir del espectáculo el viento sepuede erigir como factor clave, puesto que en función de cómo sople se puedever una carrera u otra. No será lo mismo intentar atacar con el viento de cara,puesto que el ciclista que te sigue tendrá menos resistencia al aire; quehacerlo con el aire de culo o de costado donde las fuerzas se igualan más y notiene tanta incidencia la aerodinámica.
Si lasinclemencias meteorológicas no lo impiden, en torno a las 17:00 horas, con elhorario más rápido, La Covatilla coronará al rey de esta Vuelta Ciclista aEspaña 2020.