Tal y como puede comprobarse en las imágenes de SALAMANCA24HORAS, la azolla está de nuevo en las aguas del río Tormes que surcan la capital salmantina.
Y es que esta planta invasora, conocida como helecho de agua o azolla, ha mostrado una gran capacidad para teñir el agua de un color rojizo. La azolla provoca fenómenos de anoxia o falta de oxígeno en las aguas que invade y su ciclo biológico la hace aparecer en primavera y verano y desaparecer en los meses más fríos.
De esta manera, aunque no se trata de una planta nociva más que por la falta de luz que provoca en las aguas y que puede afectar a especies animales y vegetales, el pasado año también apareció en el mes de mayo y fue retirada en los primeros días de junio.