Con respecto a la reforma de la administración local, Beteta ha asegurado que la ley potenciará el papel de las Diputaciones y garantizará, de ese modo, que los municipios de menos de 20.000 habitantes no vean mermados sus derechos básicos. Una medida que afecta de lleno a la provincia de Salamanca, pues 361 de sus 362 municipios, con excepción de la capital, tienen menos de 20.000 habiantes.
En el periodo de un año se someterá a los servicios públicos municipales y a los de las mancomunidades a un proceso de evaluación, y, ha precisado, si en esa prueba los municipios obtienen un resultado negativo debería ser una "causa determinante" para "encomendar esa prestación a las diputaciones provinciales". Asimismo, ha dicho que para los municipios con más población se acordaría una fórmula supramunicipal para la prestación de servicios de "carácter voluntario".