En un segundo plano, Tom es clave en el nuevo Reina Sofía. Apenas le gusta aparecer en los focos y mucho menos en los medios de comunicación, pero su día a día para la mejora de la instalación es vital para Unionistas de Salamanca. El director de Relaciones Institucionales del club lleva trabajando meses para convencer al Ayuntamiento de la necesidad de invertir en la instalación y adaptarla al fútbol profesional.
Los banquillos corrieron de su gestión. Fue el propio Tom el que estuvo trabajando mano a mano para conseguir un patrocinador para costear la instalación de los nuevos banquillos que se estrenaron ante el Sporting de Gijón en Copa del Rey. Y también ha sido la cabeza visible para encontrar la situación ideal en la instalación de los nuevos videomarcadores y las pantallas LED en el Reina Sofía. De hecho, la primera idea era colocar solo en la parte baja pero Tom ha insistido para conseguir la solución y también hacerlo en la parte superior de la instalación.
Ahora le queda el golpe final. El club ya cuenta con el proyecto final del Reina Sofía y trata que el Ayuntamiento acepte la inversión económica para dotar de una grada nueva muy amplia (en el club esperan que llegue a los cuatro mil asientos nuevos en el lugar en el que se encuentra la grada antigua) y también cerrar tres de las cuatro esquinas. En este punto es clave la mejora de los accesos para poder dividir las gradas y sectorizar el campo para evitar que todos los aficionados entren por el mismo acceso.
En este último punto pasa gran parte del futuro del club a corto y medio plazo. Sin mayor capacidad en el Reina Sofía, Unionistas tiene limitado su crecimiento a nivel social. Tom seguirá trabajando en ello para completar su ansiado proyecto del Reina Sofía.
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