La Universidad de Salamanca crea la Red de Igualdad para eliminar en todos y cada uno de sus campus la discriminación y la violencia de género

Se trata de la extensión de la Unidad de Igualdad de la USAL, que hace poco celebró su décimo aniversario, a todas las sedes del Estudio salmantino para así favorecer que “cualquier mujer que se vea discriminada o que sufra un acto de violencia tenga una referencia en su entorno”

 Red de Igualdad
Red de Igualdad

La Universidad de Salamanca ha anunciado la creación de una Red de Igualdad para velar por la igualdad de género en todos y cada uno de sus campus. Así lo han detallado el vicerrector de Política Académica y Participación Social, Enrique Cabero, y la directora de la Unidad de Igualdad de la Universidad de Salamanca, Inmaculada Sánchez Barrios.

El vicerrector ha valorado que el Estudio salmantino, que fue la primera universidad en incluir en sus estatutos una Unidad de Igualdad cuyos miembros son elegidos directamente por el Claustro Universitario -y cuenta con miembros de todos los estratos de la comunidad universitaria- vuelve a ser pionero a la hora de interconectar todos sus campus y nombrar a personas responsables para extender el trabajo de esta Unidad, que es “espléndido”.

De la misma manera, Enrique Cabero también ha explicado que se está trabajando con otras universidades para “definir y lanzar proyectos centrados en la igualdad efectiva entre mujeres y hombres” que tendrán el afán de “repercutir en toda la sociedad”. Esto es gracias también al acuerdo suscrito con la Junta de Castilla y León -concretamente, con las Consejerías de Familia e Igualdad de Oportunidades y de Educación-, que permite desarrollar un “trabajo coordinado” con otras administraciones.

En concreto, la iniciativa presentada este martes pretende que la actividad que desarrolla la Unidad de Igualdad -cuya sede está en el Patio de Escuelas- se traslade “de manera directa” a todos los campus de la USAL, tanto en la propia ciudad de Salamanca como en el resto de municipios donde la universidad tiene sedes: Villamayor, Béjar, Ávila y Zamora.

El objetivo no es sólo que las acciones de la Unidad de Igualdad lleguen a dichos campus, sino que “sirva como referencia para todos los miembros de la comunidad universitaria y tengan a alguien de manera próxima que les indique cómo actuar”. Por ello, Enrique Cabero cree que será “una herramienta especialmente útil y eficaz para seguir avanzando en materia de igualdad”.

Una red que favorecerá que “cualquier mujer que se vea discriminada o que sufra un acto de violencia tenga una referencia en su entorno”

La directora de la Unidad de Igualdad, Inmaculada Sánchez Barrios, recordó que si hace poco se celebraban los 10 años de la creación de este servicio, ahora se da un paso más para seguir trabajando en materia de igualdad, tanto en la tutela de los derechos como en la protección de la mujer en casos de violencia de género o de discriminación.

De la misma manera, estas personas delegadas velarán por la igualdad de todos los miembros de la comunidad universitaria, tanto extendiendo las actividades que se realizan de formación como en la prevención de la violencia de género, ya que hasta ahora “existía alguna distancia entre los campus” y la sede de la unidad, por lo que desde este momento “cualquier mujer que se vea discriminada o que sufra un acto de violencia tendrá una referencia en su entorno a la que pueda acudir”.

Los responsables de la Unidad de Igualdad en los diferentes son: en el Campus de la Zona Antigua, María del Mar Canedo Alonso; Campus Canalejas, Vicente José Marcet Rodríguez; Campus Ciudad Jardín, Carmen Herrero Alonso; Campus Fonseca, Guillermo Robles Saiz; Campus Unamuno, Ana María Hernández Najac; Campus Ávila, Sonsoles Ramos Ahijado; Campus Béjar, Emma López Massa; Campus Matacán, Santiago Luqué Mombiedro; Campus Villamayor, María Rosa Hermosa Prieto; y Campus Zamora, Isabel Vicario Molina.

Inmaculada Sánchez Barrios quiso agradecer la disposición de todos ellos a la hora de formar parte de esta Red de Igualdad puesto que implica una responsabilidad que supone “estar pendientes y ayudar a todos los que lo necesiten”, puesto que serán la referencia “de todas las personas que les trasladen incidencias y peticiones y tendrán que adaptarse según situaciones”.

Una medida que refuerza, además, la buena percepción que tienen en otras universidades de la Unidad de Igualdad de la USAL, puesto que “siempre recibimos halagos cuando mantenemos la reunión de unidades de igualdad de las universidades españolas”, confirmó la directora del Servicio.

Se detectan pocos casos de violencia de género en la USAL, “pero nos gustaría que no hubiese ninguno”

Los casos que la Unidad de Igualdad detecta tanto de violencia de género como de discriminación se intentan resolver primeramente o, si son casos de violencia, se ponen en conocimiento de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y, a las víctimas, si así lo desean, se las deriva a los psicólogos que forman parte del Servicio de Asuntos Sociales.

En los últimos tres años, la Unidad de Igualdad ha tenido constancia de tres casos de violencia de género en el curso 2016/2017; dos casos en el 2017/2018; y otros dos casos en el curso que está a punto de terminar. Este dato es bastante bajo puesto que hablamos de una comunidad universitaria de más de 30.000 estudiantes, 2.000 miembros del PDI y 1.000 miembros del PAS. Además, entre 10 y 20 personas solicitan información al servicio cada año.

Estos casos denunciado, además, “no han sido demasiado graves” puesto que “una estudiante fue derivada atención psicológica y otra de las personas afectada no precisó de ayuda, puesto que parece que se ha reconducido”. Además, sólo uno de los casos denunciados en los últimos tres años se produjo en el ámbito de la universidad, y el resto “en ambientes más privados, como su domicilio, o en zonas de fiesta”.

Eso sí, la directora de la Unidad de Igualdad reflejo que “igual se dan pocos casos porque no se denuncian más o porque no se ponen de manifiesto, y no podemos saberlo”, motivo por el que espera que esta medida de crear una Red de Igualdad ayude a conocer más casos, de haberlos, y lograr en el futuro “que no haya ninguno”.

En definitiva, otra iniciativa que sirve para “seguir generando instrumentos útiles para lograr los objetivos en la igualdad efectiva entre mujeres y hombres”, finalizó el vicerrector, Enrique Cabero.

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