Una "llamada de esperanza" para gestionar las emociones y mantener a raya la salud mental: “Una persona con baja autoestima es una persona nula”

En el último año, el 'Teléfono de la Esperanza' ha experimentado un crecimiento en sus llamadas: "La gente está pasando por situaciones de crisis mayores, hay muchas más llamadas de suicidio"

Equipo del 'Teléfono de la Esperanza' del que forma parte Ramoni Ledesma, vicepresidenta del 'Teléfono de la Esperanza' en Salamanca
Equipo del 'Teléfono de la Esperanza' del que forma parte Ramoni Ledesma, vicepresidenta del 'Teléfono de la Esperanza' en Salamanca

Cuidar de la salud emocional y mental es una de las partes esenciales de la vida para gestionar los pensamientos, comportamientos y las emociones. Todo ello, es imprescindible para estar sano física y emocionalmente, que sirve tambien para que nuestras relaciones con el resto de las personas sean también sanas.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define a la salud mental como “un estado de bienestar mental que permite a las personas hacer frente a los momentos de estrés de la vida, desarrollar todas sus habilidades, poder aprender y trabajar adecuadamente y contribuir a la mejora de su comunidad”.

Habilidades que muchas personas no saben enfrentar por si solas, pero que sí son capaces de enfrentar y de afrontar sobre todo si cuentan con ayuda. Una ayuda que en este caso brinda el ‘Teléfono de la Esperanza’ de Salamanca, que lleva más de 25 años velando por este ‘bienestar’ que cita la OMS.

El trabajo que se lleva a cabo desde el ‘Teléfono de la Esperanza’ consiste en “promover la salud emocional”. Una misión encomiable de hace más de 25 años por una treintena de voluntarios.

En concreto, la vicepresidenta del ‘Teléfono de la Esperanza’ de Salamanca, Ramoni Ledesma advierte de que, en la actualidad, debido al ritmo de vida que llevamos, muchas personas “no nos estamos valorando, nos faltan herramientas para saber que valemos, y esa falta de autoestima nos hace estar mal”. Remarcando así que “la enfermedad mental estaba desmarcada de las enfermedades, cuando muchas veces es más incapacitante que la física. De hecho, una persona con baja autoestima es una persona nula porque cualquier persona le va a causar daño. Por eso es importante tener herramientas para gestionar las emociones”.

Y para aprender a gestionar las emociones existen una serie de talleres de crecimiento personal y de formación que se imparten en el ‘Teléfono de la Esperanza’. Se trata de cursos para adultos, dirigidos a ayudar a la gestión de las emociones de las personas: “Hay cursos que se van añadiendo como el de las ‘Emociones tóxicas', y luego también hay cursos que están condicionados a haber hecho otros, porque hay que tener ya unas herramientas para saber afrontarlos”. Por ejemplo, para realizar el curso de las ‘Emociones Tóxicas’ habría que haber realizado antes el de ‘Inteligencia Emocional’ y ‘Gestión de las emociones’.

También existen otros tipos de cursos porque “cada persona tiene sus necesidades”, según apunta Ramoni, que a su vez confiesa que uno de los cursos más recomendables para empezar es el de ‘Autoestima’: “El curso de autoestima es uno de los talleres fundamentales porque a veces nos pasan cosas y no sabemos por qué no nos estamos valorando. Nos faltan herramientas para saber que valemos y esa falta de autoestima nos hace estar mal. Y luego hay cursos muy importantes que tampoco dependen de otros como la ‘Comunicación no violenta’, porque es importantísimo sabernos comunicar, pero tan importante es también buscar nuestro bienestar, y por supuesto ‘Pensar bien’, porque hay mucha diferencia entre una persona que ponga a uno en lo peor, a que la gestione de otras maneras y sobre todo a que no le ponga pensamientos negativos”.

  • Entre otros de los cursos que se imparten en el ‘Teléfono de la Esperanza’ es el de ‘Mindfulness’ , que traducido significa “atención plena”. Sobre él Ramoni detalla que “es un curso que es compatible con cualquiera de los otros, que se imparte los viernes de 6 a 8. Todos los cursos son gratuitos y con este curso lo que hacemos es centrarnos en lo que estamos haciendo en ese momento, esa es la atención plena”.

Todos estos son cursos que “nos dan herramientas para evitar muchos problemas de salud mental, y de temas emocionales, incluso la prevención del suicidio, porque en estos tiempos a veces nos faltan herramientas para enfrentarnos a todas las situaciones que tenemos y estos cursos nos ayudan a afrontarlo todo mejor”.

Aunque estos son talleres específicos de adultos, desde el ‘Teléfono de la Esperanza’ también impartirán formación para los jóvenes: “Para adolescentes vamos a empezar a dar charlas y talleres en los colegios porque hay que empezar a facilitarles herramientas para que no vean estas dificultades y no sufran estas situaciones”.

La aceptación del público salmantino es muy positiva respecto a este tipo de formaciones: “Los cursos tienen mucha aceptación porque llevan muchos años impartiéndose, y porque son talleres que no están vinculados ni a política ni a religión, porque el ‘Teléfono de la Esperanza’ es una ONG donde todo es altruista, porque del trabajo que hacemos los voluntarios lo único que recibimos es la satisfacción de la ayuda que damos, que es una gratificación enorme.

Se puede decir que a veces tenemos tanto reconocimiento que eso es lo que te hace seguir adelante porque hay llamadas que son muy duras, atender un suicidio en curso es muy duro, pero si en ese momento consigues que esa persona reflexione y pueda pararlo, eso ya para nosotros es irnos para casa satisfechos. Lo que sí es verdad, es que eso no es suficiente, tiene que haber una implicación de todas las instituciones para que esa persona tenga mañana una continuidad.

Esa persona necesita un seguimiento de su problema, por eso hay que hacer un plan entre todos, no sirve solo esta atención que tenemos desde el teléfono, tiene que haber una continuidad. A nivel nacional hubo en el Congreso de los Diputados unas jornadas precisamente para buscar compromisos con las instituciones, para que todo esto primero se divulgue, que se estaba divulgando precisamente desde organizaciones como la nuestra porque hablar de suicidio era un tabú, pero es que la realidad era la que era, y ya había mucha gente que se estaba suicidando.

Ahora parece que lo vamos incorporando y la gente que se atreve a decirlo puede evitar su muerte, antes no se atrevían a decirlo, lo mismo que las enfermedades mentales que nadie hablaba de una depresión. Lo vamos integrando y eso es lo que nos ayuda a tener tratamientos. Estos cursos intervienen en la vida de las personas como puede intervenir un medicamento, porque al final la persona se siente identificada, se siente escuchada, siente que sabe lo que le pasa y se siente reconocido su problema, dándose cuenta de que eso no es un invento”.

En cuanto al balance de 2022 y lo que llevamos de 2023, Ramoni reconoce que en Salamanca “hay mucha más necesidad. La gente está pasando por situaciones de crisis mayores, hay muchas más llamadas de suicidio”.

Horarios de lostalleres de crecimiento personal y formación del voluntariado impartidos de octubre a diciembre, durante una hora:

Imagen de WhatsApp 2023 09 21 a las 11.04.21
Imagen de WhatsApp 2023 09 21 a las 11.04.21

El ‘Teléfono de la Esperanza’ es una ONG de voluntariado y acción social cuya principal misión consiste en promover la salud emocional que el teléfono lleva haciendo más de 50 años a nivel nacional y más de 25 a nivel local.

La atención es de 24 horas al teléfono. Los 365 días al año siempre hay gente.

Las inscripciones a estos cursos se mantienen abiertas y se pueden realizar de forma presencial en la sede del paseo de San Vicente, 101, frente al hospital Virgen de la Vega, en horario de lunes a viernes de 19:00 a 20:30 horas. Aunque también, se pueden llevar a cabo vía telefónica a través del número 923349446, o en salamanca@telefonodelaesperanza.org.

 

 

 

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